Todos en alguna ocasión hemos tenido agujetas. Nos referimos a ese dolor muscular que se produce cuando previamente hemos sobreutilizado músculos que normalmente no usamos, o que no usamos de manera tan agresiva. El origen de estos dolores son las microrroturas, que llegan con la actividad física y son los que generan la futura reconstrucción muscular. Uno de los entrenamientos que producen agujetas son los de cuestas, ya que al subir esas pendientes estamos exigiendo a nuestras piernas un esfuerzo superior al diario que hacemos en los rodajes en llano. Y al bajar, cuando frenamos con los cuádriceps, ocurre lo mismo. Por eso después de una carrera de montaña, los participantes suelen padecer sobre todo agujetas en los cuádriceps. Tener agujetas no es sinónimo de estar parados y sin hacer deporte. Al revés. Podemos hacer nuestro entrenamiento con normalidad, e incluso la actividad nos aliviará; a corto plazo. Eso sí, nos costará más realizar el movimiento de la zancada y notaremos molestias en los primeros minutos. Existe un pequeño truco que recomiendan los especialistas para prevenir las agujetas: correr una vez cada dos semanas a ritmo de tu Umbral durante 30 minutos. También podemos incrementar la capacidad de nuestro organismo de transportar combinando ritmos. Con este pequeño consejo, será más difícil que sufras las incómodas agujetas.
UN TRUCO PARA PREVENIR LAS AGUJETAS
- Publicación de la entrada:9 septiembre, 2018
- Categoría de la entrada:Entrenamiento