Trabajar sus piernas con una sesión de salto de cuerda, mejorará su cadencia y zancada.
Para los boxeadores los pies rápidos son tan importantes como las manos rápidas, por lo que han saltado la cuerda durante siglos para desarrollar esta cualidad. Saltar a la cuerda también ayuda a los triatletas a que se vuelvan ligeros sobre sus pies. Brincar rápido incrementa la frecuencia de zancada, lleva a una resistencia muscular superior, acondicionamiento aeróbico y potencia.
El entrenamiento:
Saltar la cuerda puede desafiar hasta al triatleta más en forma, por lo que empieza de forma conservadora con seis series que duren de 30 a 60 segundos cada una. Corre en tu lugar, concentrándote en elevar las rodillas. Descanse de 30-60 segundos entre cada round. Incremente hasta tres minutos. Además de ser sencillo y económico, saltar la cuerda nos brinda muchos beneficios. Veamos cuáles son:
- Tonifica los músculosCuando saltas la cuerda trabajan todos los músculos de tu cuerpo, comenzando con el grupo muscular central, los superiores y los inferiores. Los hombres usan en la parte superior los bíceps y el trapecio para mantener la cuerda en constante movimiento. Esta práctica endurece y tonifica estos músculos. A su vez, los abdominales también se contraen por la fuerza de los saltos. De los grupos musculares inferiores, es evidente que el movimiento coordinado de las piernas y la cuerda genera tensión muscular, lo que tonifica y desarrolla los cuádriceps, glúteos, femorales y las pantorrillas.
- Mejora la circulación sanguínea
El movimiento que se genera cuando saltamos la cuerda beneficia directamente nuestro sistema circulatorio. El corazón trabaja para cumplir eficazmente con el bombeo de la sangre a todo el cuerpo. Igualmente la hace circular por las arterias, lo que disminuye el riesgo de sufrir un infarto o un paro cardíaco.
- Aumenta la capacidad pulmonar
Al saltar la cuerda nuestros pulmones reciben mayor cantidad de aire, lo que ayuda si existen problemas respiratorios. Asimismo, mejoramos nuestra resistencia física, lo que permitirá ejercitarnos mayor tiempo sin fatigarnos.
- Quema calorías
Saltar la cuerda tan solo 30 minutos quema, aproximadamente, 400 calorías así como grasas de todo el cuerpo. Esto convierte a este ejercicio en un gran aliado cuando queremos perder peso.
- Eliminación de toxinas
Cuando saltamos la cuerda, expulsamos las toxinas de nuestro cuerpo por medio del sudor. Esto permiten que se regeneren las células y que funcionen de forma óptima.
- Evita el estrés y mejora la actividad cerebral
Aunque no se ha probado científicamente, se dice que la coordinación necesaria para saltar la cuerda crea nuevas conexiones neuronales. Además, las endorfinas que se liberan mientras se hace este ejercicio nos ayudan a relajarnos y alivian el estrés y la angustia. Esto genera una mentalidad positiva que aumenta las posibilidades de tener una mejor calidad de vida.