Durante la época de calor, no necesitas una dieta especial, se trata de sostener una alimentación saludable general, pero teniendo en cuenta algunos aspectos específicos que nos cuenta el Nutricionista deportivo Juan Bruno.
El deportista, en la época de calor, se enfrenta a 3 riesgos:
- Deshidratación.
- Mayor estrés oxidativo.
- Menos apetito debido a las altas temperaturas.
Es por eso, que además de una alimentación suficiente, armónica y variada, necesitas prestar atención a prevenir la aparición de alguno de los problemas que te mencioné antes, te cuento a continuación cómo lograrlo.
- Reforzar tu estrategia de hidratación diaria.
Cómo siempre digo, no se trata sólo de beber durante los entrenos, sino de hacerlo de forma sostenida durante todo el día, para llegar correctamente hidratados al momento del ejercicio.
Pero además, y más aún cuando atravesamos periodos de temperaturas elevadas, debemos asegurar una buena reposición de electrólitos, sales, fundamentales la función muscular, del sistema nervioso, la regulación de la presión arterial, etc.
Para esto, una buena opción es consumir durante el día, además de agua, AGUA DE COCO que es rica en potasio y otros minerales, y además es baja en carbohidratos. También podéis prepararos sueros rehidratantes adicionando un gramo de sal marina, un gramo de citrato de magnesio, jugo de limón y/o jengibre a un litro de agua.
Y por supuesto, no dejar de utilizar bebidas isotonicas, incluso en entrenamientos no tan largos.
- El estrés oxidativo
Este se da cuando entrenamos a altas intensidades y/o durante muchas horas, pero esata producción de radicales libres se ve aumentada cuando lo hacemos bajo el estrés del calor abrumador.
Es por eso que es esencial asegurar un aporte diario de antioxidantes (que en general no se almacenan en el organismo), sobretodo incluyendo más cantidad de frutas y vegetales, que afortunadamente, en ésta época las encontramos en su plenitud, siendo más frescas y con mayor contenido de esos valiosos antioxidantes.
Entre las que tenemos que buscar se encuentran: arándanos, sandía, melón,todos ricos en vitaminas C, minerales, agua y vitaminas del complejo B (también necesarias para el metabolismo energético).
Pero además, puede resultar útil, la utilización de un suplemento multivitaminico específico, para lo que debes consultar con tú Nutricionista acerca de si lo podéis necesitar y cuáles te convienen (no todos los vitamínicos son iguales ni para cualquier fin).
- Reducción del apetito.
Por último, es frecuente que cuando atravesamos días de mucho calor, se reduzca el nivel de apetito, y entrenamientos exigentes + poco apetito no son buena combinación.
Si no cubrís adecuadamente tus demandas de energía podéis caer en un síndrome de déficit calórico, con merma en el rendimiento y riesgo de lesiones.
Para sobrellevar esto, es útil fraccionar la alimentación en varias ingestas de poco volumen, enfocandote en alimentos líquidos y frescos, ya que estos son más fáciles de consumir y no llenan tanto, y nos permitirán incorporarlos más fácilmente (por ejemplo, yogur que permite adicionar cereales y frutas).
También podemos utilizar MALTODEXTRINA en bebidas, ya que es alta en carbohidratos pero de bajo poder endulzante, por lo que permite reforzar licuados y jugos, lo mismo ocurre con el WHEY PROTEÍN, con la que podemos incorporar una buena cuota de proteína de alto valor biológico, lo anterior en especial,en aquellos días de entrenamientos más exigentes o en los que debes realizar varias sesiones.