El mundo del running está lleno de historias de superación, pero no todos los días te encuentras con una historia tan inspiradora como la de Adam Gorlitsky.
En 2005, a la edad de 19 años, Adam sufre un accidente de coche que le deja paralizado desde el ombligo para abajo. Durante 10 años su vida se limita a las posibilidades de su silla de ruedas, a aceptar lo sucedido y a hacer las paces con el destino.
Pero todo cambia (para bien) en agosto de 2015, cuando le ofrecen probar un novedoso artilugio de movilidad. Se trata de un exoesqueleto, unas piernas robóticas para que personas con parálisis irreversible puedan volver a caminar.
9 meses más tarde, Adam participa con su exoesqueleto en su primera carrera de 10 kilómetros y desde entonces no ha parado. A día de hoy ha participado en más de 50 competiciones, desde carreras de una milla hasta maratones.
En la entrevista hablamos de su accidente, de la importancia de tener objetivos en la vida, de sus planes de futuro y de porqué se considera un tipo con suerte.
1. Tu vida cambió por completo a la edad de 19 años. ¿Qué pasó el 30 de diciembre de 2005?
Me quedé dormido al volante, volviendo en coche desde la universidad a casa de mis padres. No llevaba puesto el cinturón de seguridad. Tras ser trasladado en un helicóptero al hospital, los médicos me dijeron que jamás volvería a andar. Un despiste de un par de segundos me había dejado paralizado desde el ombligo para abajo.
2. De 2005 a 2015 tuviste que acostumbrarte a vivir en una silla de ruedas. ¿Qué recuerdas de esa época de tu vida?
Al principio, lo pasé mal. Al principio había diez llantos había solo una risa, ese era el ratio. Pero poco a poco me iba encontrando mejor. A veces estaba triste, pero por suerte nunca caí en una depresión. Tengo una familia muy unida y grandes amigos, que siempre han estado a mi lado.
En la clínica de rehabilitación había un chico que, tras un accidente de motocross, se había quedado paralizado desde el cuello para abajo. Pintaba flores con la boca. Viendo cosas así, pones las cosas en perspectiva. En el fondo sabía que yo había tenido suerte.
3. ¿Qué sentiste cuando probaste el exoesqueleto por primera vez?
En el momento de levantarme de la silla y estar de pie ya no me sentía discapacitado, sino recapacitado, empoderado. Cuando uso el exoesqueleto es como estar en un video juego, me siento mitad hombre, mitad Terminator.
4. ¿Cómo funciona?
El exoesqueleto tiene tres posiciones que manejo con un reloj: estar sentado, levantarse y caminar. Para caminar utilizo muletas y hago cambios de peso con la cadera. El exoesqueleto tiene sensores cerca de la cadera que activan el movimiento de las piernas robóticas. Es un ejercicio brutal para los músculos del abdomen, no es tan fácil como parece.
5. En 2016 hiciste tu primera carrera de 10k, la Cooper River Bridge Run. Te llevó casi 7 horas. ¿Por qué hacer algo tan difícil?
Necesito objetivos en la vida. Aprender a caminar con el exoesqueleto no me resultó fácil. Tener un objetivo ambicioso me ayudó a ser constante y practicar todos los días.
Por otro lado, estaba ahorrando para comprar mi propio exoesqueleto y había empezado una campaña de recaudación de fondos. Que un hombre paralítico haga una carrera de 10 kilómetros es algo que nadie se imagina. No se me ocurría mejor manera de llamar la atención para conseguir mi objetivo.
6. Fundaste I Got Legs para recaudar dinero para tu propio exoesqueleto. I Got Legs se ha convertido en una fundación con la que ayudas a otras personas conseguirlo también. ¿Cuánto cuesta un exoesqueleto?
Cuando lo compré costaban en torno a 85.000 dólares. Ahora rondan los 120.000 dólares.
7. El pasado 18 de febrero completaste la media maratón de Fort Lauderdale (Florida) y estableciste un récord mundial. ¿Nos puedes contar cómo te fue durante la carrera?
Sí, pero antes te cuento lo de mi maratón. En 2020 hice la Charleston Marathon en 33 horas, 16 minutos y 28 segundos. Tengo el actual récord Guinness.
En febrero hice la media maratón de Fort Lauderdale en 11 horas, 54 minutos y 44 segundos. La primera parte de la carrera me sentí bien, pero a partir del kilómetro 15 empecé a sufrir. Quería ir demasiado rápido y había descuidado la hidratación y la ingesta de comida. Me pasó factura pero seguí adelante. Fue muy duro pero me quedo con la lección aprendida para futuras competiciones.
8. ¿Qué planes tienes para el 2023?
En mayo de 2023 quiero batir mi propio récord de maratón en Cleveland, Ohio. He perdido algo de peso y estoy entrenando mucho, mi objetivo es bajar de 30 horas.
También quiero convertir las carreras con exoesqueleto en un deporte paralímpico y seguir impulsando los avances tecnológicos para ayudar a personas con parálisis irreversible.
9. ¿Qué lección vital podrías compartir con nosotros?
No hay mal que por bien no venga… Siempre hay un lado positivo. Estoy cumpliendo mis sueños y tengo proyectos de futuro que me hacen ilusión. Estoy en una posición en la que puedo ayudar a mucha gente. Tengo mucho apoyo de mi familia y mis amigos… En realidad, me siento un tipo con suerte.
Para más información sobre Adam Gorlitsky y su fundación:
Página web: https://www.igotlegs.org/
Instagram: i_got_legs
Fotografías: Adam Gorlitsky
También puedes escuchar la entrevista (en inglés) en el podcast English for the Long Run.
Entrevista de Monique Lambie