Léster Fernández acaba de hacer historia en la Škoda Titan Desert Morocco. Con un 81% de discapacidad ha sido capaz de completar una de las pruebas ciclistas más duras del mundo. Ha cumplido su objetivo, llegar a la meta tras las seis etapas disputadas y “demostrar que las personas con discapacidad podemos tener sueños y superar retos. Que el no, no existe. Que tenemos que tirar para adelante. Aportar algo de esperanza a las personas que lo tienen más complicado”.
Tras cruzar la meta, prácticamente no podía hablar de la emoción. Fue después de un rato cuando comentó que “el equipo me ha arropado como si fuera un bebé, me han hecho sentir muy bien. Tenía unas expectativas buenas antes de venir, por lo que la gente me comentaba, pero no conocía la prueba e iba a ciegas. Cuando llegas aquí y lo vives con este ambiente tan maravilloso, es una experiencia increíble. Yo Tenía unas expectativas de cinco y lo que vivido ha sido de 9’8”
El ciclista cubano, que ha impresionado a todos los participantes y staff de la Titan, consiguió su participación gracias a ganar una beca Titan Life by KH-7, destinada a ayudar a causas solidarias con su proyecto Happy Wheels, con el que pretende ayudar a personas que se encuentran en una situación similar y que puedan conllevar mejor su discapacidad mediante el deporte.
